Investigación en la UV busca entender la relación entre la flora bacteriana en el intestino y la función cerebral
Un estudio en conjunto entre el Laboratory of Biochemical Neuropharmacology de la Cuny School of Medicine de Nueva York en Estados Unidos y el Centro de Investigación y Modelamiento de Fenómenos Aleatorios de Valparaíso (CIMFAV) de la Universidad de Valparaíso, busca establecer la relación entre la flora bacteriana que existe en el intestino y la función cerebral.
Esta investigación, que se encuentra en el marco del Proyecto REDES190038 de ANID (ex CONICYT) denominado «Statistical modeling for novel biochemical mechanisms to target neurological conditions», cuenta con la participación -por parte del CIMFAV-, de los investigadores, doctora Karine Bertin, doctor Cristian Meza y la doctora María Soledad Torres. Mientras que la contraparte es liderada por el director del Center for Underrepresented Research in Addiction (CURA) del CUNY School of Medicine y especialista en Neurofarmacología, doctor Gonzalo Torres, quien explicó la importancia de este estudio.
“Queremos entender la relación que existe entre la flora bacteriana en el intestino (gut microbiota) y la función cerebral, específicamente los desórdenes del sistema nervioso central, porque hay una cantidad impresionante de estudios que sugiere que la comunidad de microorganismos que vive en el intestino, puede alterar la progresión de enfermedades, incluyendo desórdenes neurodegenerativos”, especificó el doctor Torres.
Este equipo -aseguró el investigador especializado en Neurofarmacología-, viene trabajando en este ámbito desde hace un par de años. “Nuestro laboratorio desarrolló un modelo de la enfermedad de Parkinson en ratas. En este modelo, neuronas dopaminérgicas del cerebro son selectivamente destruidas con una toxina que se llama 6OHDA y las ratas desarrollan un fenotipo que tiene ciertas similitudes con el mal de Parkisnon, el cual se caracteriza por la degeneración de neuronas dopaminérgicas. En estas condiciones, el experimento que quisimos hacer fue alterar la flora bacteriana con antibióticos en el modelo animal y ver qué pasaba con el fenotipo motor y neuroquímico. El resultado fue bastante impresionante, las ratas que recibieron los antibióticos presentaron síntomas menos prominentes comparadas con ratas sin antibióticos”.
Es decir, explicó, “en un modelo animal de Parkinson, las ratas que reciben antibióticos presentan menos síntomas que ratas controles. Es como si los antibióticos tuvieran un efecto protector. Lo que queremos con esto, es llegar a un posible tratamiento para el Parkinson u otras enfermedades neurológicas a través del intestino, alterando la flora bacteriana con, por ejemplo, probióticos, dieta, etc.” enfatizó.
CIMFAV
El trabajo que ha desarrollado el equipo del Centro de Investigación y Modelamiento de Fenómenos Aleatorios de Valparaíso, ha sido el de modelar los procesos bioquímicos o biológicos de individuos, a través de modelos estadísticos. Así lo indicó la Investigadora CIMFAV, doctora Karine Bertin.
“Nosotros proponemos usar modelos mixtos que permiten modelar procesos a través del tiempo, aislando el efecto que pueden tener ciertos tratamientos de características propias de los individuos que los reciben. Estamos interesados en estudiar la interacción entre la serotonina, la dopamina y ciertas enzimas y proteínas”, puntualizó.
Respecto de la importancia de este proyecto, Bertin agregó que “una buena comprensión de estos procesos podría tener implicancia en el desarrollo de nuevos tratamientos contra la adicción a drogas, Parkinson o la depresión, así como en enfermedades crónicas o autismo”.